Los cánones de belleza también están presentes bajo las sábanas y, cada vez más, las mujeres desean que sus genitales luzcan bellos y, al tiempo, tener unas relaciones sexuales más satisfactorias. Intervenciones de cirugía estética como la vaginoplastia, la labioplastia, vulvoplastia y clitoplastia, que hasta hace unos años eran meramente anecdóticas, están en auge. Comodidad, estética o mayor placer sexual elevan un 20% estas operaciones en toda España y, tal y como explican los profesionales del sector en Galicia, esta tendencia también se observa en nuestra comunidad.

En la mayor parte de los casos son razones de "comodidad" las que impulsan a las mujeres a solicitar una intervención en sus genitales. La más demandada es la labioplastia: la reducción de los labios menores en mujeres con un crecimiento anómalo de dichos órganos genitales. Al sobresalir de los labios mayores pueden llegar a sufrir dolor por el roce de la ropa o al practicar deporte, adquiriendo una apariencia agrietada y negruzca. Esta hipertrofia también puede resultar molesta durante las relaciones sexuales.

El doctor Antonio López Pita y su equipo aseguran que, en los últimos años, sí ha percibido un aumento de las demandas de labioplastias. "Hemos realizado varias a mujeres jóvenes, en la treintena", apunta. "Cuando los labios menores sobresalen por encima de los mayores, la mujer puede tener molestias por humedecer en exceso su ropa interior y también durante el acto sexual", apunta el médico. "Hay labios que sobresalen hasta 10 centímetros y resulta muy incómodo para la mujer; no es simplemente un problema estético", justifica.

López Pita asegura que esta intervención no es en exceso complicada. "Eso sí, hay que tener precaución con la línea cicatrizante y yo prefiero no usar bisturí eléctrico, ya que la vagina está muy vascularizada". Lo que más miedo da a las pacientes y también a los médicos es la alteración de la sensibilidad y no alcanzar el clítoris, "pero es algo que no ha ocurrido en ningún caso que conozca", asegura.

El doctor Jorge Novoa coincide con López Pita en que las operaciones estéticas de las zonas íntimas femeninas "son cada vez más demandadas". Entre ellas, la que más realizan en su clínica es también la labioplastia, alcanzando una media de dos intervenciones al mes. "Los labios menores que sobresalen son muy incómodos para las mujeres y estéticamente les producen muchos problemas porque incluso se aprecian con el biquini", afirma. "Muchas dejan de ir a la playa o al gimnasio y merma mucho su autoestima", añade el especialista.

Por su parte, el doctor José Ramón Larrañaga alterna su consulta en Galicia y en Barcelona y asegura que en la ciudad condal es donde más percibe el aumento de la demanda. "Barcelona siempre es la primera por lo que muy pronto seguramente también Galicia se unirá a esta realidad", augura. Al igual que sus colegas, la hipertrofia de los labios menores es la operación que más pacientes tiene, "aunque también la liposucción del monte de Venus está en aumento", apunta.

En su caso, la mayoría de las pacientes tienen unos cuarenta años. "Son mujeres que, al separarse, inician una nueva vida social y se fijan en algo que quizás hasta entonces le habían dado menor importancia", describe.

Junto a los divorcios, los expertos achacan este aumento de casos a la proliferación de espacios comunes como vestuarios de gimnasios y piscinas "donde las mujeres se comparan".

El principal "culpable" de esta hipertrofia, indica Larrañaga, es "el envejecimiento", que provoca, como en el rostro y otras zonas del cuerpo, el poco atractivo descolgamiento. "El perfil de mujer joven procede de secuelas de episiotomías, embarazos gemelares, varios embarazos... pero es menos habitual", concluye.