Galicia recibe un aprobado raspado -5,5 puntos sobre diez- en la aplicación de la ley de dependencia, según el dictamen del Observatorio Estatal que analiza cada seis meses cómo llevan las comunidades el desarrollo de esta normativa. De este modo, Galicia se mantiene con la misma nota que hace un año y comparte la décima posición con Murcia y Extremadura (ambas también con 5,5 puntos), solo por encima de las cinco autonomías que suspenden: Baleares (4,5); Madrid (4), Asturias (2,5); Comunidad Valenciana (2) y Canarias (0,5).

En el lado contrario, País Vasco y Castilla y León que obtuvieron un "diez sobre diez", la máxima puntuación en todos los parámetros de eficiencia elegidos por la Asociación Española de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales para medir la aplicación del sistema, tales como gestión, servicios, listas de espera, gastos por habitante o investigación, entre otros.

El presidente de la Asociación, José Manuel Ramírez lamentó que se sigan "cronificando las puntuaciones paupérrimas" de Canarias, Valencia o Madrid y criticó el retroceso de dos autonomías que eran "emblemáticas" en el desarrollo de esta normativa, como son Castilla-La Mancha y Aragón, que bajaronun punto, si bien se sitúan aún en un 8,5. También retrocedió Cataluña, pasando del notable a un 6,5; Navarra, que bajó hasta el 6, y se mantienen estables Murcia, Galicia y Extremadura, con una puntuación media de la tabla (5,5). Andalucía, por su parte, se elevó hasta el 8.

Se detecta en estos últimos seis meses una "paralización y un estancamiento" de la ley, lo que lleva a los expertos a tener una "preocupación gravísima" en algunas comunidades, donde "ni siquiera se aplica la tasa de reposición", es decir, reemplazar a aquellas personas que fallecen por otras de la lista de espera.

También se observa esta "estabilización" en el denominado "limbo de la dependencia", donde están más de 312.000 personas con un derecho reconocido pero sin recibir prestaciones. Este "retroceso" supone, según el informe, un recorte presupuestario de más de 1.000 millones de euros en el ejercicio 2011 y que se hayan dejado de crear 30.000 nuevos trabajos.

El estudio también analiza la aportación económica de las autonomías por habitante para dependencia. Galicia, con 92,16 euros por habitante, es la cuarta que menos destina, sólo por encima de Baleares (74,4), Valencia (82,2) y Canarias (43 euros). En el lado contrario, La Rioja (222,14 euros por habitante) y Cantabria (209), según el informe hecho público por la Asociación.