El Juzgado de Instrucción número 1 de Palencia ha imputado a los padres de un niño de ocho años con autismo por un presunto delito de abandono de familia, al negarse los progenitores a llevar a su hijo a un colegio de educación especial, ya que defienden su escolarización en un centro educativo normal.

El juez decidió abrir diligencias tras una denuncia del Ministerio fiscal en la que se acusaba a los padres por "negarse reiteradamente a que su hijo asistiera al Centro de Educación Especial Carrechiquilla de Palencia".

Sin embargo, los padres del niño defienden su actuación y afirman que rechazaron la segregación de su hijo en un colegio de educación "especial", por considerarlo un trato discriminatorio, según informó ayer la asociación Solcom, una entidad creada para la defensa de los derechos humanos de las personas discriminadas por su diversidad funcional, que apoya la lucha de la pareja.