En una década, la edad media de los donantes de órganos en Galicia pasó de los 45,8 años a los 60,5. De hecho, el 23% de los donantes de los que se extrajeron los órganos que sirvieron durante el año pasado para realizar 291 transplantes en la comunidad superaban incluso los 75 años. La razón -aparte de "reflejar el perfil de la sociedad gallega", según la Xunta-, se halla en la disminución de los accidentes de tráfico y el predominio de muertes por accidentes cerebro vasculares, una incidencia vinculada sobre todo a la vejez.

En el balance presentado ayer por la gerente del Sergas, Nieves Domínguez, y el director de la Oficina de Coordinación de Transplantes, Jacinto Sánchez, destaca, en todo caso, que el número de trasplantes realizados por los hospitales gallegos volvió a incrementarse, esta vez un 3,4%, pasando de los 281 de 2010 a los 291 del pasado año.

Además, en el caso de los de páncreas (11) y de riñón (146, el más realizado) se alcanzaron, según Domínguez, "los niveles más altos de la historia" en Galicia, comunidad en la que, desde 1981, puede presumir ya de 5.756 trasplantes de órganos realizados. La lista se completa con los de hígado (80 casos), corazón (18) y pulmón (36), lo que sitúa a Galicia "a la vanguardia", según el Sergas, en este tipo de cirugías. Por otra parte, por cada trasplante de órgano, "se hacen entre cinco y siete implantes de tejidos", añadió Jacinto Sánchez.

En 2011, además, tal y como informó ayer la Xunta, se redujo en 26 personas la lista de espera para trasplantes. Sin embargo, esa lista está engrosada todavía por 417 personas. La mayoría (361 casos) están pendientes de un riñón. Por eso no es de extrañar que el Sergas admita que la comunidad aún debe mejorar las cifras de trasplante de este órgano procedente de donante vivo (en general, de familiares).

Los principales motivos de muerte de los donantes gallegos -durante el pasado año- fueron los accidentes cerebro vasculares, que representan un 71,2% del total, seguidos de los traumatismos cráneo encefálicos que no fueron consecuencia de accidentes de tráfico. De este modo, los donantes fallecidos por accidentes en carretera pasan a representar de un 14,4% de las donaciones en 2010 a solo un 5% en 2011.

Por otra parte, aunque la tasa de donadores por millón de habitantes en Galicia es de 31,2 (la europea está en 18,1), la gerente del Sergas reconoció que hay que incrementarla y que asimismo existe un problema con las negativas familiares, que se situaron en un 28,7%, por encima del estatal. Al respecto, Domínguez recordó que un estudio realizado por el Sergas en colaboración con la Universidade de Santiago determinó que las razones esgrimidas para no donar están relacionadas, por una parte, con el tratamiento del cadáver (desfiguración, tardanza en recuperar el cuerpo), pero también con motivos vinculados a la religión.

Por eso, Nieves Domínguez subrayó que dentro de la labor de concienciación, y junto al desarrollo de charlas en colegios, han recabado la colaboración con la Iglesia. "Le trasladamos nuestra preocupación y la Iglesia también trabaja con nosotros para trasladar a la ciudadanía en general el mensaje de que la donación es buena para todos", explicó la gerente del Sergas durante la presentación del balance anual de trasplantes.