Los espárragos con mayonesa son la opción sana por excelencia, el plato que todo mundo tiene en mente cuando quiere hacer dieta. Lo más curioso es que no siempre resulta un plato ligero, sobre todo si la dosis de mayonesa es generosa. Sea como sea, los espárragos son vegetales muy interesantes, con dosis elevadísimas de fibra, con un notable aporte de vitamina C y con un cierto efecto diurético. Tienen además un sabor suave y son de fácil preparación.
De ahí que sean tan famosos como alimento light. Claro, si se trata de espárragos de lata, el aporte de vitaminas es considerablemente menor, pero el de fibra permanece bastante íntegro. El aporte de sodio, en cambio, es mayor en el espárrago de lata, con lo cual el efecto diurético disminuye.
En cuanto a la mayonesa, es una acertada mezcla de aceite de oliva y huevo, por lo cual posee un montón de nutrientes, entre ellos vitamina E, proteínas, vitamina A, calcio, hierro y dosis notables de grasas monoinsaturadas. Por supuesto es energética, unas 700 kcal/ 100 g; por esta razón su dosis junto a los espárragos condicionará de forma determinante la energía del plato. En fin, que es un plato ligero, fácil y con un aporte nutritivo considerable. Lo único que hay que recordar es que la dosis de mayonesa ha de estar bajo control…
- Una forma fácil de aligerar y hacer más digestiva la mayonesa es mezclarla a partes iguales con yogur natural.
- Una combinación menos frecuente pero muy sabrosa es la de espárragos verdes a la plancha con un poco de sal maldon y un toque de mayonesa.
- Por cierto, a veces se olvida que los espárragos blancos se pueden comprar frescos. Son más sabrosos y quedan deliciosos calientes.
- Por último, recordar que el espárrago verde es bastante más vitamínico que el blanco
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