Actuar sobre el exceso de radicales libres de oxígeno y de productos derivados de la ciclooxigenasa-2 es la nueva estrategia en la lucha contra la hipertensión arterial, tal y como han avanzado dos grupos de investigación de la Red de Investigación Cardiovascular.

Los expertos afirman que incidir sobre estos dos mediadores inflamatorios podría suponer resultados en el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares. A su juicio, éstos son los que producen "alteraciones vasculares".