Los católicos en Estados Unidos están divididos sobre lo que buscan en el próximo Papa, según una encuesta publicada ayer, que apunta que el 58% aceptaría que los curas se casaran y el 60% ve bien que el próximo obispo de Roma venga de África o de América Latina. Si bien el 46% de los consultados cree que el próximo Pontífice debería mover la Iglesia católica en una "nueva dirección", el 51% considera que debe "mantener las posiciones tradicionales".

Este porcentaje aumenta entre los católicos que dicen ir a misa al menos una vez a la semana, ya que casi dos tercios, el 63%, quieren que el Papa mantenga la posición tradicional de la Iglesia católica.

Estos son algunos de los datos extraídos de la encuesta realizada por el foro sobre religión y vida pública del centro Pew de Washington a 1.504 adultos entre el 13 y el 18 de febrero, tras la inesperada renuncia de Benedicto XVI.

Entre los datos más llamativos destaca que el 58% consideraría "bueno" que el nuevo Papa que sustituya a Benedicto XVI autorizara el matrimonio a los curas, frente a la oposición del 35% y un 8% que dijo no tener opinión al respecto.