Europa lo acaba de elegir como mejor investigador joven de los 27 y, al mismo tiempo, el Ministerio de Economía le niega un contrato Ramón y Cajal "por falta de liderazgo científico" y por "tener un nivel de reconocimiento internacional por debajo de la media en la gente de su edad". Estos argumentos han desatado la indignación de la comunidad científica. Diego Martínez, natural de Foz y que lleva ya tiempo en Suiza trabajando en el mayor acelerador de partículas del mundo, el CERN, asegura que la evaluación "es un desastre". Ayer mismo presentó una alegación en el Consulado de España en Ginebra. "Ya no por conseguir la plaza o no, que todos mis compañeros pensaban que me la darían, sino porque no admito que conste sobre mí un informe así, porque daña mi reputación y cualquiera que lo lea me negaría un trabajo", explica Diego desde el laboratorio suizo.

-¿Era una posibilidad real regresar a España?

-No es una necesidad vital inmediata pero sí me gustaría volver a Santiago. La Ramón y Cajal la solicité a finales de 2012. Todos los que me conocen confiaban en que me la dieran pero no fue así. Es que no me quedé ni en lista de espera. El problema es que la evaluación que hacen de mí es un desastre y quiero que lo corrijan.

-¿Presentada ya la alegación?

-Sí, esta misma mañana (por ayer). El informe que hicieron no tiene sentido. Está mal. En un apartado que vale 20 puntos me dieron 9,9, por debajo de la mitad, y pone: 'el candidato tiene un nivel de reconocimiento internacional por debajo de la media de la gente de su edad', y no es así. No es por nada pero tengo un galardón europeo. 'La falta de liderazgo científico' tampoco es real; estoy en el órgano que dirige el experimento y uno de los motivos del premio europeo es que fui el investigador principal del experimento elegido.

-¿Es una cuestión de reducción de plazas y presupuesto o un problema en el cálculo de puntuaciones y en la forma de realizar las evaluaciones?

-A ver, influyen las dos cosas. Pero en mi caso la evaluación está mal hecha. Es por ello que presento la alegación, ya no por la plaza, que tampoco la puedes exigir, sino contra el informe en sí, porque si alguien lo lee y no me conoce fijo que con esas referencias no me dan un trabajo, y eso no puede ser.

-¿A cuántas plazas optaba?

-Contratos Ramón y Cajal creo que hay 175, frente a los 250 que había antes, creo. Pero en mi especialidad (Física Experimental de Partículas) son entre dos y cuatro, nada más, siempre hay muy pocas. No puedo decir nada porque tampoco conozco a los compañeros elegidos para dichos contratos. Pido que corrijan mi informe y punto.

-¿Qué cree que puede haber pasado en dicha evaluación?

-Pues no lo sé, no conozco lo que ocurre en las comisiones. Tendrían que opinar los evaluadores. Tengo la sensación de que igual se guiaron por un criterio de edad, en el sentido de dar una oportunidad o un último intento para hacerse con un Ramón y Cajal a investigadores mayores que yo. Al resto igual nos pasaron un poco por encima y nos despacharon.

-¿De momento se quedará en el CERN?

-Lo de la Ramón y Cajal no es un drama para mí, aunque ha tenido gran repercusión. Estoy bien en Ginebra. En algún momento quiero volver a Santiago pero la necesidad inmediata, repito, no existe. No estoy en el paro. Tengo un trabajo bueno y cobro más del doble de lo que me pagarían en Galicia, eso es cierto. En el CERN tengo un contrato para tres años y por aquí estaré.

-¿Ha recibido ofertas durante su estancia en Suiza?

-En los dos últimos años he recibido varias de Reino Unido, una de ellas de la Royal Society. También me consta que Francia se ha interesado por mí más de una vez, aunque no materializó el contacto. Es que los que trabajamos aquí nos conocemos entre nosotros y surgen cosas. De momento me quedo.

-¿Qué opina del panorama en investigación en España?

-Lo que puedo decir es que el presupuesto que dedica España a la investigación está por debajo del que dedican otros países. Eso es un hecho.

-¿Habría que cambiar el sistema de evaluación?

-Mi evaluación no ha estado bien pero también entiendo que ser elegido para cuatro plazas que hay es muy complicado. No sé si los baremos son objetivos para que se reflejen bien los méritos independientemente de la edad.

-¿Cuánto lleva en Suiza?

-Prácticamente el 50% del tiempo de mi carrera hasta ahora lo pasé en estancias en Suiza, en el CERN.

-¿Cómo sienta un premio al mejor investigador joven de Europa?

-Bien. Fue por tres trabajos que hice en mi experimento: por el diseño, por la validación del mismo y por ser investigador principal. Tras los resultados a los que llegamos otra gente sigue ahora por esa vía.