El Consello Social de la Universidad da Coruña experimentó el curso pasado con el espíritu emprendedor (a través de un grupo inicial y pionero de alumnos) creando un taller propio para emprendedores. Como expresa Antonio Abril, presidente de la institución coruñesa que trabaja para acercar la universidad a la sociedad y hacer estrategias conjuntas de futuro, de esa primera experiencia formativa nacieron dos proyectos reales, hoy convertidos en empresas que avanzan solas (SaborPlace) y (Viajeros LowCost).

¿Por qué tener una escuela de emprendedores en el norte de Galicia y otra en el sur? Para el rector de Vigo, Salustiano Mato (a través en este caso de Campus do Mar), y así lo expresó en varias ocasiones, y para Antonio Abril, del Consello Social, con el apoyo del rector coruñés Xosé Luis Armesto, se daban todas las condiciones para reunir al alumnado "en una única iniciativa", en este caso con un tema clave que debe estar presente en la mente de los estudiantes: el Campus do Mar, si bien no es la única inspiración posible. Más que teoría, que también, la formación se basa en habilidades, competencias y claves para transferir lo aprendido.

"Cooperación interuniversitaria y fortalecimiento de la relación entre la universidad y la empresa, son valores presentes en la Escuela de Emprendedores que coinciden precisamente con los del Consello Social de la UDC", argumenta Abril. Para él está claro que la universidad "debe ser emprendedora porque el desarrollo económico es la única manera de crear riqueza y empleo; que solo puede venir de la mano de las empresas"