La Fiscalía de Menores ya había alertado del "colapso" de los centros de la Xunta para acoger a los menores con órdenes judiciales pendientes por la comisión de algún delito.Y ahora la Consellería de Benestar, en la información trasladada al Valedor do Pobo, le pone cifras a esta problemática. Entre 2008 y 2012 las medidas de internamiento impuestas por los jueces a menores gallegos se duplicaron pasando de 225 a 390. Sin embargo, solo hay 119 plazas y están todas ocupadas. Esto significa que hay lista de espera para que los menores puedan ingresar en los centros a cumplir su condena.

La Xunta apela al "contexto económico desfavorable" pero advierte que está haciendo un esfuerzo para incrementar el número de plazas existentes. Sin embargo, el Valedor insiste en que "el desfase entre recurso y necesidad es verdaderamente alarmante" y además recrimina a la Xunta la falta de plazas para internamientos terapéuticos cuando el menor sufre adicción al alcohol o a las drogas. Recuerda que tampoco hay unidades de salud mental especializadas para atender casos conflictivos.