El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se ratificó ayer en que si el Gobierno central se resiste a permitir la dispensación libre en las boticas de la vacuna de la meningitis B, el Ejecutivo gallego "está en disposición de diseñar con los epidemiólogos y los pediatras un programa piloto", de modo que si la vacuna es recetada por un pediatra, pueda ser dispensada en ese programa "que se va a desarrollar en el Sergas". "Se vuelve a demostrar que para nosotros", alegó, "la prioridad económica es la prioridad sanitaria, y que hacemos en cada sitio lo que los profesionales nos señalan. Si los pediatras y los epidemiólogos en Galicia nos señalan que tenemos que hacer eso, lo haremos". No obstante, indicó que el Ministerio de Sanidad "tiene que abrir una reflexión sobre la posibilidad" de dispensar la vacuna si se prescribe.

Por su parte, el sindicato CIG consideró ayer que la venta en las farmacias "no es la solución", sino incluir la vacuna en el calendario infantil para que "todos los niños" tengan acceso a ella por igual. Además, denunció el "desabastecimiento" que están sufriendo los hospitales gallegos de ciertas vacunas, lo que provocó cambios en el calendario vacunal ante "la pasividad" de la Xunta. Y también, añaden, hay problemas con otros fármacos.