Un único examen internacional sobre el conocimiento del idioma español y apto para los cinco continentes entrará en vigor a partir del próximo curso. Se trata de una prueba similar a las que dispone el inglés con los exámenes de la Universidad de Cambridge, que nace bajo un concepto "panhispánico," aglutinador de las distintas voces del castellano y con la ambición de convertirse en un patrón globalmente reconocido.

Los reyes de España aprobaron la nueva evaluación internacional del dominio del idioma español ayer en México, en el inicio de actividades del Servicio Internacional de Evaluación de la Lengua Española (Siele) que englobará a todos los países hispanohablantes. La principal novedad es que tanto la inscripción como el examen se efectuarán por medios electrónicos y con conexión en línea.

La iniciativa se ha desarrollado conjuntamente por el Instituto Cervantes, la Universidad Nacional Autónoma de México -la mayor de habla hispana- y la Universidad de Salamanca -la más antigua-. Las previsiones establecen un mínimo de 300.000 candidatos anuales, que aumentarán a 750.000 en cinco años, según los más optimistas.

En un acto en el Antiguo Colegio de San Ildefonso de la capital mexicana, Felipe VI y Letizia firmaron el protocolo de aprobación de actividades iniciales junto con el director del Instituto Cervantes, Víctor García de la Concha, y los rectores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro, y de la Universidad de Salamanca, Daniel Hernández.

Estas tres instituciones serán las encargadas de impulsar esta iniciativa que se hace en el marco de "un mundo globalizado" en el que "la acreditación del conocimiento de lenguas está cobrando un auge realmente extraordinario", dijo García de la Concha.

Esta será la primera vez en el ámbito del español en que una prueba "de evaluación y certificación de nuestro idioma incluya textos orales y escritos procedentes de todo el mundo hispanohablante", añadió el académico. Un producto "novedoso" y "de gran calidad" que han creado estas tres instituciones inspiradas en otros prestigiosos exámenes como el Toefl de la lengua inglesa.

Según explicó, por su parte, Hernández, tres son los elementos que han servido de punto de apoyo para crear esta prueba, entre ellos la "dirección adoptada por las Academias de la Lengua Española en los últimos años", que "ha conducido a la definición de un marco panhispánico". Además, se ha hecho "en el marco común de referencia europeo para las lenguas" que "proporciona una escala homogénea" al aprendizaje de un idioma, y también apoyado con el plan curricular del Instituto Cervantes desarrollado para la evaluación de la competencia en la lengua española.

El rector de la UNAM, que es la mayor universidad del mundo hispánico, señaló, a su vez, que esta prueba de evaluación es parte de las "responsabilidades" de "transmitirlo" y "cultivarlo", y la calificó de "una aventura cultural extraordinaria" Narro dijo que "más allá de niveles culturales y educacionales el dominio de los idiomas representa parte de la superación de los individuos", y que en las palabras está gran parte del "secreto de nuestra especie".