La Formación Profesional Básica son dos años de FP pensada para alumnos que no son capaces de terminar la ESO, con el reto de evitar que abandonen el sistema y conseguir despertar su interés por el estudio. La ratio de alumnos es de veinte por clase, pues son "cursos difíciles ya que son estudiantes que necesitan retomar el interés en los estudios después de salir de la ESO sin terminar".
La FP Básica sustituye a los viejos Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPIs). En el curso que acaba de terminar, 2.922 estudiantes estaban matriculados en FP Básica y 1.633 terminaban los Programas de Cualificación.
De los 2.922 alumnos que este año estrenaron la FP Básica, 1.148 estaban matriculados en la provincia de A Coruña, 1.237 en la provincia de Pontevedra, 257 en la de Ourense y 280 en Lugo. La gran mayoría cursaban estudios en centros públicos.
La FP, de dos años de duración, se divide en tres tipos de módulos: los asociados al catálogo nacional de cualificaciones, que sería la parte práctica para ejercer la profesión, los módulos para adquirir competencias en lenguas, ciencias o matemáticas y los módulos de formación en los centros de trabajo.
