Enfermeras del servicio de Urgencias del Hospital Álvaro Cunqueiro (HAC) de Vigo denunciaron ayer un "caos" estructural, organizativo y de personal, que aboca a los profesionales a trabajar "de mala manera", a que los pacientes estén "desatendidos" y a conatos de "motín" por parte de familiares. Un grupo de profesionales comparecieron acompañados por el presidente del Colegio de Enfermería de Pontevedra, Carlos Fernández, y el abogado Javier Pérez, quien ratificó que denunciarán al Sergas ante la Fiscalía por presunta omisión del deber de socorro.

Una de las enfermeras del servicio de Urgencias, Lilianne Bettrenieux, pidió "perdón" a los pacientes por "el caos" que tienen que padecer por falta de protocolos en la recepción y distribución de los mismos, lo que deriva en "pérdida de tiempo", que, según la gravedad de los casos, "puede provocar la muerte". Bettrenieux denunció que "se pierden" tanto pacientes como historias clínicas porque el servicio está organizado a modo de "cadena de montaje" en una fábrica de coches. Esta profesional abundó en que lo habitual es que cada paciente tenga un médico y un enfermero de referencia durante todo el tiempo que permanece en Urgencias, pero en el Álvaro Cunqueiro éstos pasan por diferentes manos y pueden estar "cinco o seis horas sin supervisión" mientras esperan en radiología. En ese tiempo, dijo, "puede ocurrir cualquier cosa fuera de mi mano", incluso "que la gente se muera por ahí y no nos vamos a enterar".

Otra enfermera, Ana Pena, denunció que no ha habido ningún protocolo para unificar la actuación de los servicios de urgencias que había en el Xeral y el Meixoeiro. Aparte de deficiencias de personal, han reportado carencias de equipación, como desfibriladores sin altas prestaciones en el área de críticos o boxes "desabastecidos" mientras hay material sin estrenar guardado en almacenes que tienen prohibido utilizar.

Pocas horas después, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, admitió que, derivado del "complejo" trasladado del hospital Álvaro Cunqueiro, se producen "desajustes", pero agradeció su labor a los profesionales.