Los niños del Reino Unido se libran desde ayer de sufrir el humo del tabaco en los coches al entrar en vigor una norma que prohíbe a los fumadores encenderse un cigarrillo cuando viajen con menores de 18 años, para evitar así que se conviertan en fumadores pasivos. Esta ley, que se extiende a cualquier vehículo privado, sancionará a aquellos que la incumplan, incluyendo al conductor o a cualquiera de los pasajeros, con una multa de 50 libras (67 euros).