El Hospital Gómez Ulla de Madrid contará con una unidad de aislamiento de alto nivel para tratar a enfermos infecciosos, equipada con los "máximos estándares" de seguridad que la sitúan "a la vanguardia" de la UE. La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, inauguró ayer esta unidad, en la que se han invertido 6,5 millones de euros y que cuenta de momento con ocho habitaciones de aislamiento de alto nivel para albergar a pacientes infecciosos, como las requeridas para evitar el contagio por el virus del ébola.

Está prevista la construcción de otras ocho habitaciones para los pacientes que deban permanecer en cuarentena.

Según explicó ayer el coordinador médico de la Unidad, el coronel Antonio Fe, debido a "problemas con algunos proveedores de instalaciones", se desconoce la fecha exacta en la que podrá entrar en funcionamiento "con pacientes estándares".