En España hay 10.000 niños menores de 15 años con diabetes, de los que un 25% tiene que modificar su tratamiento médico para poder ir a la escuela, ya que no existe una normativa que obligue a los centros educativos a responsabilizarse de la atención a este colectivo salvo en alguna comunidad. Son datos aportados ayer por el presidente de la Federación de Diabéticos Españoles (FEDE), Andoni Lorenzo, tras acudir junto a la secretaria de Administraciones Públicas del PSOE, Susana Sumelzo, al Congreso para registrar una proposición no de ley que tiene como fin mejorar la atención de los niños con diabetes y alergias alimentarias en los colegios.

Lorenzo aseguró que los diabéticos llevan mucho tiempo luchando para que los menores que sufren esta patología consigan "un trato igualitario" al resto de los alumnos en los centros educativos. Según indicó, el 90% de los menores de 15 años no sabe qué insulina tiene que ponerse, además un 60% no sabe ponérsela y un 50% de los padres de diabéticos tiene que dejar de trabajar para poder cuidar adecuadamente de su hijo.