Netflix, la plataforma estadounidense que permite a sus usuarios ver todas las series, películas y documentales disponibles mediante una tarifa plana mensual, arrancó ayer en España. Los usuarios de internet ya pueden suscribirse y ver al instante una amplia variedad de series, documentales y películas, así como otros programas de todo el mundo. Cada socio elige qué programación quiere ver y en qué momento hacerlo.

Similar a un servicio de videoclub online, gestionado a través de una página web, no es una televisión: para acceder a la plataforma que nació en 1997, sólo se necesita un dispositivo conectado a internet, desde un smartphone, a una smart TV, una consola, una tableta o un ordenador.

Netflix ha sabido atender a los nuevos hábitos de consumo de la audiencia, en especial la más joven y, en el primer trimestre de 2015, contaba con 62 millones de suscriptores en el mundo, 21 de ellos fuera del mercado estadounidense. Para ello, sus técnicos y diseñadores han trabajado sobre el binomio de que sea fácil de utilizar y accesible para todo el mundo.

Después de meses de rumores e incertidumbres sobre si este servicio online llegaba o no a España, finalmente el pasado 4 de junio se confirmó que Netflix tendría versión española. Fue tal la expectación generada que, tras el acuerdo del jueves 4 de junio, el hashtag #HolaNetflix se convirtió rápidamente en tendencia en la red social Twitter. Este mes de octubre, también desembarca en Italia y Portugal.