Cerca de 120.000 personas en España -y unas 7.000 en Galicia- sufren cada año un ictus, una enfermedad cerebrovascular que representa la segunda causa de muerte y la primera de incapacidad, ya que la mayoría de los pacientes sufre secuelas que en el 40% de los casos resultan inhabilitantes.

Según informó la Sociedad Española de Neurología (SEN) con motivo del Día Mundial del Ictus que se conmemora hoy, en los últimos años en España se ha observado un aumento del 40% en el número de personas atendidas por esta patología en los hospitales del Sistema Nacional de Salud (SNS).

Esto sitúa al ictus como un problema de primera magnitud desde el punto de vista sanitario y socioeconómico ya que supone la octava causa de hospitalización, una de las patologías que mayor estancia hospitalaria requiere y es la responsable de entre el 3 y 6% del gasto total sanitario.