"El Gobierno acudió muy rápido a salvar a los bancos y los mayores tuvieron que acudir a salvar a sus familias". De esta forma tan tajante definía ayer en A Coruña José Manuel Sánchez, de CCOO, la situación que atraviesan muchos jubilados gallegos que tienen que ayudar a hijos y nietos a salir adelante mientras observan cómo "sus pensiones no se revalorizan", lo que según el sindicato derivará en "más pobreza energética entre este colectivo el próximo año".

El Observatorio Social de las Personas Mayores 2015, elaborado por CCOO, revela que sólo el 5,9% de los mayores de 65 años se encontraba en riesgo de pobreza en el año 2014, lo que lleva a que ayuden a familiares que se encuentran en peor situación. Sin embargo, desde el sindicato alertan de que si no se revalorizan las pensiones, finalmente la situación de estos mayores también se precariza.

"Uno de cada tres gallegos cobra la pensión mínima que oscila entre los 630 y los 780 euros en función de si tiene cónyuge o no", resaltaron desde el sindicato, donde incidieron en que Galicia es la comunidad con las pensiones más bajas.

El informe de CCOO en el que se analizan cuestiones sanitarias -seis de cada diez españoles mayores de 65 años sufre alguna patología crónica- o dependencia -hasta mayo más de 38.000 gallegos cobraban alguna prestación por su grado de dependencia- aborda también otros aspectos más olvidados como la violencia de género o la sexualidad entre los mayores. El informe revela que, en 2013, hubo siete víctimas mortales a manos de sus parejas o exparejas que superaban los 65 años, lo que supuso el 12% del total. "Otra cuestión muy olvidada y de gran importancia es la diversidad y la sexualidad entre los mayores", explicó Ana Martínez Lópoz, de CCOO, durante la presentación del Observatorio Social de Personas Mayores 2015 que se realizó en A Coruña.