El papa Francisco mantendrá mensualmente visitas privadas durante el Año Santo Extraordinario que comienza el martes, "gestos personales" para destacar su compromiso con los marginados y los pobres, según anunció ayer el Vaticano. La iniciativa se enmarca en los actos del Jubileo de la Misericordia, según el presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, Rino Fisichella.

El 18 de diciembre el Papa cumplirá un "gesto simbólico" y abrirá una "puerta de la misericordia" en el albergue Don Luigi di Liegro, un centro de la Cáritas romana en el que desde hace veinticinco años son acogidas personas con problemas. A partir de ese momento, Francisco "dará inicio a los gestos que un viernes al mes pretende ofrecer como expresión de las obras de misericordia", señaló Fisichella.

"Estos gestos tendrán un carácter de visitas privadas por parte del Santo Padre", añadió Fisichella.