La Real Academia Galega (RAG) y la Xunta celebraron ayer el 55º aniversario de la publicación de Memorias de un neno labrego, la obra maestra del recién fallecido escritor Xosé Neira Vilas, autor que desde ayer da nombre al auditorio de la Biblioteca de Galicia, en la Cidade da Cultura. Con motivo de la conmemoración del aniversario de la obra más representativa del escritor de Vila de Cruces (Pontevedra), numerosos representantes de la cultura de Galicia celebraron con este acto un auténtico homenaje a un hito en la narrativa del siglo XX gallego.
Xesús Alonso Montero, actual presidente de la RAG, y que prologó varias ediciones de la autobiografía infantil de Balbino, consideró que "algún día habrá que hacer un club de lectores" de esta obra, que resultó revolucionaria tanto literaria como socialmente. "Con él (Neira Vilas) mucha gente en Galicia empezó a leer en gallego" recordó y reivindicó la "personalidad literaria, intelectual y cívica" del escritor Neira Vilas.
Asimismo, el responsable de la RAG insistió en que con la pérdida de Neira Vilas, que falleció el pasado 27 de noviembre de 2015, "la literatura gallega no está de luto, porque los libros siguen ahí para nuestro deleite y para que otros escritores aprendan". Y más allá de este evento, Alonso Montero pidió que la sociedad "se gobierne desde los criterios" del personaje más famoso de Neira Vilas, Balbino, un niño de aldea, "porque los Balbinos unidos jamás serán vencidos".
El conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, señaló que "este auditorio llevará con orgullo un nombre imprescindible para las letras gallegas, el nombre de un talento creativo universal, que ha inspirado a muchas generaciones y que, sin duda, será referencia para muchos más gallegos en el futuro".
Rodríguez reivindicó también la importancia del lugar en el que se le dedica este espacio al ilustre escritor, puesto que combina "la modernidad", por el espacio físico que lo ocupa, con la "memoria colectiva", que "está en sus vitrinas".
El conselleiro destacó también que la Xunta trabaja en la organización de un "acto institucional" en el que "toda la sociedad gallega" reconozca la "trascendencia literaria" de Neira Vilas.
Al homenaje celebrado ayer en Santiago asistieron, entre otros, el presidente del Consello da Cultura Galega, Ramón Villares; el secretario general de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, los alcaldes de Santiago, Boqueixón y Vila de Cruces -Martiño Noriega, Ovidio Rodeiro y Jesús Otero, respectivamente-; y el presidente de la Real Academia Galega de Bellas Artes, Manuel Quintana Martelo. Además, el músico Roi Casal interpretó acompañado por su arpa acústica dos poemas de Neira Vilas musicados.
El acto se organizó un 5 de enero para conmemorar que tal día como ayer pero de 1961 salía al mercado en Buenos Aires la primera edición de Memorias dun neno labrego.
