Casarse por la Iglesia seduce cada vez a menos coruñeses. El número de matrimonios celebrados por el rito católico se redujo a la mitad en la última década al pasar de las 2.945 bodas religiosas que se registraron en 2005 a las 1.297 de 2014 (un 56% menos), según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Pese a que cada vez hay menos parejas que deciden casarse -las bodas descendieron un 15% en la provincia en la última década, especialmente desde el inicio de la crisis-, no todas las formas experimentaron la misma tendencia. Mientras las bodas religiosas cayeron en picado en A Coruña, en el mismo periodo se dispararon los matrimonios civiles: un 53% más al pasar de 1.728 en 2005 a los 2.650 de 2014. Una dinámica similar a la que experimentaron el resto de provincias gallegas donde las bodas religiosas descendieron un 66% en Pontevedra, un 56% en Ourense y un 46% en Lugo.

Ante esta caída en picado, las bodas civiles ya superan a las que se celebran por la Iglesia en A Coruña, una tendencia generalizada en todo el país. En España hubo más de 159.000 enlaces en 2014, de los que el 63% se realizaron en juzgados o ayuntamientos. Una situación similar a la que se vive en las provincias gallegas: A Coruña registró 2.650 bodas civiles, frente a 1.297 religiosas; Lugo 600, por 374 por la Iglesia; Ourense, 533, frente a 308 y Pontevedra contabilizó 2.073 enlaces civiles, por sólo 852 religiosas. Los datos revelan, por tanto, que en la última década la estadística de enlaces matrimoniales ha dado un giro de 180 grados y si antes las bodas por la Iglesia eran mayoría, ahora los matrimonios civiles superan a los religiosos en todas las comunidades.

Una tendencia que se mantenía en el primer semestre del 2015 -últimos datos ofrecidos por el INE-, donde las bodas civiles superaban a las religiosas en todo el país. En números absolutos, Andalucía (4.249), Madrid (2.480) y Comunidad Valenciana (1.595) son las autonomías con mayor volumen de enlaces religiosos, un ranking en el que Galicia, con 726 en los primeros seis meses de 2015, ocupa el octavo lugar. A ellas habría que sumar trece bodas que se celebraron en la comunidad gallega bajo el rito de otra religión distinta a la católica (es la séptima autonomía con más casos).

Los datos del INE revelan que se producen una media de cuatro bodas cada día en la comunidad gallega, pero lo cierto es que no todos los meses tienen la misma demanda por parte de los futuros marido y mujer. Tanto en las bodas religiosas como en las civiles, el número de enlaces se dispara al llegar la primavera aunque la diferencia es más notable en el caso de los matrimonios por la Iglesia. Si Galicia sólo registró 15 bodas religiosas en el mes de enero, la cifra ascendió a 274 en mayo y 289 en junio. En el caso de los civiles la cifra es más estable -más de 300 en febrero y marzo- aunque con un ligero repunte al llegar los meses con mejor tiempo: en mayo y junio hubo 718 y 839 enlaces, respectivamente.

Al margen del tipo de matrimonio -por la Iglesia, por otro rito religioso distinto al católico o civiles- el INE permite ver el perfil de quienes deciden abandonar la soltería en Galicia. La mayoría de bodas se dan entre cónyuges que tienen entre 30 y 35 años (3.371 en 2014), pero la comunidad también registró 17 enlaces en menores de 20 años y más de 300 entre quienes superaban los 60.