Familias que se resistían a bajar a Portugal se lo piensan de nuevo. Otras ya lo hacen para adquirir la segunda dosis. Una vez puesta la primera vacuna, no debe transcurrir mucho tiempo para aplicar la segunda. Por ello, padres que no la consiguen en Galicia apuestan de nuevo por Portugal. "No hace falta que reserve, tenemos stock suficiente", dijo el boticario luso a una madre que acaba de viajar al país vecino para comprar la segunda dosis (el coste en Portugal es de 97 euros). En este caso la madre viajó con el niño y programó la aplicación en una clínica privada de la localidad pontevedresa Tui, justo después de comprarla. Evitó así el viaje de vuelta a casa con la vacuna por el riesgo de que se rompa la cadena de frío.