El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha condenado al Servizo Galego de Saúde (Sergas) a indemnizar con 25.000 euros a cada uno de los cuatro hijos de una paciente con un cuadro de hipertensión severa que acabó falleciendo por el tratamiento deficiente que recibió en el hospital Povisa (Vigo).

El Defensor del Paciente informa de que esta mujer, de 72 años, acudió el 20 de mayo de 2009 al centro de salud de Cangas, donde le diagnosticaron una cefalea de localización frontonucal, acompañada de vómitos y de otros problemas de tipo neurológico, y de allí fue remitida al hospital, donde falleció días después.

El tribunal aprecia en su fallo una desatención de la sintomatología que presentaba la paciente en el servicio de urgencias, ya que le administraron ansiolíticos y la enviaron para su casa, y que su médico de cabecera le hiciera un seguimiento.