El conocido como "dentista del horror", el holandés Jacobus Van Nierop, compareció ayer por primera vez ante la justicia francesa para responder de la acusación de haber mutilado las bocas de un centenar de pacientes entre 2008 y 2012. En su primera declaración, el odontólogo aseguró que la gente "no le interesaba" desde la muerte de su esposa y admitió su responsabilidad en los hechos que se le atribuyen.