El sueño sigue un patrón que alterna ciclos de unos 90 minutos de duración y que se repiten a lo largo de toda noche. Estos ciclos se componen de una fase denominada no Mor (movimiento de ojos rápido) y de una fase Mor (conocida también como fase Rem, por sus siglas en inglés). Al empezar a dormir, se entra en una fase de sueño no Mor, que tiene, a su vez, cuatro etapas.

EEtapa 1. Es un estadio de duermevela, de sueño ligero, en el que se perciben la mayoría de estímulos del entorno.

EEtapa 2. En el segundo estadio, el sistema nervioso bloquea la recepción de información sensorial y se deja de sentir lo que ocurre en el entorno. En esta fase, se mantienen una respiración y un ritmo cardiaco regulares, mientras que la temperatura corporal desciende.

EEtapas 3 y 4. Se entra en un sueño más profundo y reparador; la presión arterial cae, la respiración se hace más lenta, se relajan los músculos. En estos dos estadios es cuando se produce la reparación de tejidos, se recupera energía y se liberan hormonas como la del crecimiento.

EFase Mor. Entonces llega el sueño profundo. Ocurre más o menos a la hora y media de haberse quedado dormido. Esta fase es muy importante porque proporciona energía al cuerpo y al cerebro, consolida la memoria y ayuda al rendimiento diario. Es también cuando se producen los sueños. Los ojos se mueven de un lado a otro (de ahí el nombre que recibe, Mor, movimiento de ojos rápido); el cuerpo está inmóvil y relajado, y los músculos, desconectados. Los niveles de cortisona bajan en picado y aumentan a lo largo de la noche para poder estar en alerta por la mañana.