El párroco de la localidad Arroyomolinos (Cáceres), detenido por supuestos abusos a menores, ha sido apartado del ejercicio de su ministerio hasta la conclusión del proceso judicial, según informó ayer el Obispado de Coria-Cáceres. La diócesis ha tomado esta determinación "pensando en el bien del Pueblo de Dios", "por la resonancia social que el hecho ya está teniendo" y "para salvaguardar todos los derechos", según informó en una nota aunque recuerda que hay presunción de inocencia. Además ofrece su "completa disposición" a colaborar con la justicia en lo que sea necesario "y en las formas que esta estime oportunas" para aclarar lo sucedido.