El uso de dispositivos electrónicos es cada vez más habitual a todas las edades. Son muchos los niños que comen mirando la pantalla del móvil de sus padres o la televisión. También se ha convertido en el ocio habitual el juego con dispositivos electrónicos de diferentes tamaños y modelos que provocan un gran estrés a los jugadores. Aunque no existen datos epidemiológicos concretos que confirmen que ver la tele de cerca, por ejemplo, suponga un problema ocular, sí deberíamos analizar al niño que actúa así porque puede ser un indicio de que tiene miopía. Consulta al especialista.

El término médico que define la fatiga ocular es la astenopía, que engloba los trastornos y molestias relacionados con la visión asociados a estos comportamientos. Se considera que sería la respuesta ante el esfuerzo muscular continuado que se realiza al forzar la vista para leer un libro, mirar una pantalla de ordenador o conducir porque el ojo debe acomodarse continuamente para ver a esa distancia, usando los músculos que lo rodean.

Entre los síntomas más frecuentes podemos incluir: cansancio ocular, sensación de cuerpo extraño, enrojecimiento de la zona, inflamación del párpado, sensación de ardor ocular, lagrimeo, sensibilidad a la luz, dificultad de enfoque, visión borrosa, ver manchas aleatorias, cefaleas, mareo, dolor cervical, contracturas musculares, etc... Se considera que se deben también a las malas posturas que adoptamos para poder utilizar los dispositivos electrónicos, por ejemplo, olvidando utilizar una ergonomía adecuada.

La percepción de estos síntomas suele realizarse al final del día, especialmente si se han invertido muchas horas en actividades que causan la fatiga ocular. Conducir, leer, coser, dibujar, etc... son actividades que pueden desencadenarlos, pues no es un problema específico de quienes trabajan en una oficina ante un ordenador, aunque estas personas se encuentran entre los grupos de riesgo.

Suele asociarse al seguimiento de hábitos inadecuados como mantener una mala postura ante el ordenador, exceder el tiempo de uso, una mala iluminación, excesivos reflejos en la pantalla, mala utilización de las lentes correctoras, uso excesivo de calefacciones que provocan sequedad ocular, etc... Realmente son factores en su mayoría controlables que deberíamos tener en cuenta para evitar los problemas que desencadenan.

Para evitar la fatiga ocular, los expertos ópticos realizan varias recomendaciones entre las que destacaría:

-Acude a tus revisiones anuales con el oftalmólogo y/o el óptico y siempre que percibas algún problema visual concreto

-Alternar las distancias de visión. Si pasas un rato mirando al ordenador, cambia tu perspectiva mirando por la ventana y ve alternando la visión de cerca y lejos para mejorar la acomodación. No lo consideres una pérdida de tiempo; es un ejercicio necesario para mejorar tu rendimiento y evitar problemas asociados

-Parpadea con un ritmo adecuado. Si estás fijando la vista en el teclado y te encuentras concentrado, inconscientemente dejas de parpadear y el ojo se va secando, provocando incomodidad. Plantéate como ejercicio habitual realizar 10 parpadeos completos lentos alternando con varios rápidos y cortos y cerrando después los ojos para descansar un poco. Repite el movimiento de vez en cuando mientras estés utilizando tu visión de cerca

-Descansa unos 5 minutos por cada hora de esfuerzo visual (leer, escribir, coser, etc...). Cierra los ojos, parpadea, mira por la ventana?lo que te resulte más cómodo

-Trabaja con luz natural siempre que sea posible. Si tienes que utilizar la luz artificial, colócala lateralmente para evitar los incómodos reflejos o sombras inoportunas que te obligan a "forzar la vista"

-Utiliza una pantalla con brillo y contraste suaves que no emitan un exceso de luminosidad que afecte a tu visión

-Ajusta el tamaño de letra para que te resulte cómodo de leer y no tengas que esforzarte excesivamente

-Coloca el ordenador a unos 60 centímetros de tu cuerpo y un poco por debajo de tus ojos

-Mantén las pantallas (del libro electrónico, del móvil, etc...) a una distancia de entre 35 y 40 cm de los ojos? y bien limpias.

-Si te sientes cansado, evita utilizar los dispositivos electrónicos.

Realizar movimientos oculares controlados puede ayudarte a mejorar la situación. Se recomienda mantener la cabeza inmóvil y seguir el movimiento de un dedo a derecha e izquierda, arriba y abajo, en círculo? y no olvides parpadear.

En ocasiones puede ser necesario utilizar gafas para corregir ametropías (miopía, astigmatismo, etc...) o eliminar reflejos. También puede ser útil aplicar una lágrima artificial para prevenir o tratar los síntomas asociados a la sequedad ocular. Consulta al especialista y sigue sus indicaciones.