Calcular mal la dosis de ciertos psicofármacos puede resultar letal. Sólo durante el último año analizado un total de 722 españoles -una media de dos al día- fallecieron por envenenamiento accidental de psicofármacos o drogas de abuso, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), correspondientes al 2014. A Coruña se sitúa entre las provincias españolas con más muertes por este motivo: con 15 casos en un año es la decimotercera provincia con más envenenamientos de este tipo, solo superada por Barcelona (87), Madrid (56), Valencia (41), Alicante (39), Vizcaya (37), Sevilla (36), Málaga (30), Baleares (37), Asturias (29), Pontevedra (23), Murcia (20) y Guipúzcoa (19). Una estadística en la que sólo se incluyen las muertes accidentales ya que los fallecidos por sobredosis conscientes de medicamentos se incluyen en otro informe diferente.
Ingerir de forma accidental una cantidad excesiva de drogas o psicofármacos terminó con la vida de 56 personas en Galicia durante el último año, lo que supone una media de una muerte cada seis días. El 40% de estos fallecimientos se produjeron en la provincia de Pontevedra (23), seguida de A Coruña -una de cada cuatro muertes en Galicia por este tipo de envenenamiento (15 casos) -, Lugo (once) y Ourense (siete). Una cifra que sitúa a la comunidad gallega como la cuarta con más casos -en un ranking que encabezan Andalucía (124), Cataluña (121),Valencia (85) y País Vasco (64)- empatada con Madrid pese a que su población es más del doble que la de Galicia.
Los datos del INE revelan que el número de muertes por envenenamientos de este tipo aumentaron un 43% en la última década en la comunidad al pasar de 39 en 2005 a los 56 de 2014. Los fallecidos por este motivo se mantuvieron estables en A Coruña y Ourense -los mismos 15 y siete casos en ambos años- y aumentaron en Pontevedra (de nueve a 23 casos) y Lugo (de ocho a 11 muertes).
El perfil de quienes fallecen por la ingesta accidental de estos medicamentos o de drogas es un varón de entre 40 y 60 años. Casi ocho de cada diez muertes que se registran en la comunidad gallega por este motivo se producen en hombres: 44 casos, frente a 12 en mujeres, según la última encuesta de Defunciones según causa de muerte del Instituto Nacional de Estadística.
En cuanto a la edad, en seis de cada diez casos, las víctimas tenían de 40 a 60 años. La franja con más muerte fue la de 45 a 49 (catorce casos), seguida de quienes tienen de 40 a 44 (diez), de 50 a 54 (ocho) y de 80 a 84 (siete). Sólo se registró una muerte de este tipo en los menores de 30 años y dos casos en quienes ya rebasaban los 90.
A este tipo de envenenamientos habría que añadir los que se producen por la ingesta de sustancias diferentes a drogas o psicofármacos, algo que se cobró la vida de 199 personas en todo el país en el último año analizado. En el caso de la comunidad gallega la cifra se redujo a once, lo que sitúa a Galicia como la quinta autonomía con más casos, sólo por debajo de Andalucía (68), , Cataluña (28), Comunidad Valenciana (20), Castilla y León (15) y Madrid (18), según datos del INE.
Los envenenamientos se incluyen en el apartado de "causas externas de mortalidad" del informe del INE, donde también aparecen otros motivos de muerte que nada tienen que ver con una enfermedad como pueden ser caídas accidentales, accidentes por fuego o quienes se ahogan. Un total de 340 gallegos -casi una media de uno diario- fallecieron a causa de alguna mala caída durante el 2014, último año del que se disponen datos. Otros 134 debido a un ahogamiento, sumersión o sofocación accidental y seis personas en accidentes con presencia de fuego, según el Instituto Nacional de Estadística.
