El brote de gastroenteritis detectado en Cataluña debido al mal estado del agua embotellada en garrafas o bidones distribuida en 925 empresas afecta ya a 3.300 personas, según el Departamento de Salud. Aigües d'Arinsal, la envasadora de este agua, ha suspendido la producción hasta que se esclarezca lo sucedido.