A la hora de querer disfrutar de un día de playa, los dueños de perros suelen encontrarse con problemas para encontrar un arenal que admita mascotas. Pese a que durante gran parte del año, los animales pueden corretear libremente por las playas gallegas, la mayor parte de los ayuntamientos prohibe la presencia de animales durante los tres meses de verano. En el caso de Galicia, este verano sólo hay seis playas aptas para perros, según informa el portal redcanina.es. La cifra ha variado en los últimos años, pero no su ubicación: la mayoría (tres) se encuentran en la provincia de Pontevedra, seguida de A Coruña (dos playas que admiten mascotas) y una en Lugo.

El Arenal en A Pobra do Caramiñal es la playa coruñesa más veterana a la hora de admitir perros. Se trata de una playa ubicada en el casco urbano de esta localidad, de 1.100 metros de longitud y que cuenta con otros servicios como acceso a discapacitados, duchas o zona deportiva cerca. El ayuntamiento de Ares también se ha sumado a la apertura de arenales para mascotas y permite la presencia de perros en una zona de As estacas, el último trozo de la playa antes de llegar al puerto.

En Lugo, la única playa que permite la libre presencia de animales es San Román mientras que en Pontevedra actualmente los perros pueden disfrutar del sol y la arena en las playas de Espiño y O Portiño en O Grove y A congorza en Cangas. Hasta el año pasado era posible ir con perros a la playa canina de la isla de la Toja y en Porto dos Padroneses (O Grove), pero ambas cerraron en 2015.