La comida nunca ha sido tan accesible y asequible como ahora, pero ¿nos alimentamos mejor que la generación de nuestros padres y abuelos? La respuesta es no, y no solo es la opinión de los especialistas. El 65% de los gallegos admite que sus padres seguían una dieta más sana; el 46% admite que come menos guisos y platos tradicionales que la generación de sus padres y el 52% afirma comer mucha carne. Asimismo, el 20% reconoce que no puede llevar una vida saludable por falta de tiempo y el 11% cree que comer en restaurantes les impide llevar un estilo de vida saludable. El dato positivo de esta encuesta, realizada por una compañía de nutrición, es que ocho de cada diez gallegos están concienciados de la importancia de comer sano.

Siga leyendo la noticia en Orbyt, o suscríbase a La Opinión de A Coruña y tenga acceso completo a todas nuestras noticias sin límites.