Un hombre leyendo el periódico y una mujer, a su lado, pintándose los labios. Con esta imagen, la compañía concesionaria del Metro de Madrid quería recrear escenas "propias" del suburbano. Apenas unos días duró esta escena en las paredes del metro ya que las quejas de los usuarios no se hicieron esperar y el sindicato CCOO llevó a la empresa a retirarlo. Esta es una de las campañas que tuvo el "honor" de ser elegida la peor y más machista de 2015 según una selección mediante votaciones realizada por la organización de consumidores Facua.

Una mujer con cinco copas, el plan perfecto era el eslogan de un anuncio del Mercado Lonja del Barranco de Sevilla y que retiró en solo unas horas ante la indignación que generó en las redes sociales.

En la misma línea de utilización denigrante de la imagen de la mujer se encontraba la campaña de un centro comercial de Alicante que, para promocionar sus rebajas, mostraba los traseros de tres mujeres en biquini con el eslogan Remajas. Tampoco los carteles duraron más de unos días.

No menos retrógrados eran los anuncios televisivos del producto de limpieza Cillit Bang, en los que sólo aparecían mujeres y fueron considerados discriminatorios por el Pleno del Jurado de la Publicidad de Autocontrol, al considerar que presentaban a la mujer como única encargada de asumir íntegra y exclusivamente las tareas del cuidado del hogar.