Más de 34.500 gallegos esperan por una intervención quirúrgica, 3.600 menos que el año pasado, y lo hacen menos días: 61,6 de media. Este dato, que incluye a los pacientes de Povisa, es el más bajo desde que existe registro de las listas de espera. Sin embargo, han engordado las listas para consultas con el especialista -8.739 personas más con respecto al mismo período del año pasado, hasta las 142.025- y para pruebas diagnósticas -12.000 más, hasta las 85.670-. Además, en 155 casos, 130 en Vigo y 25 en Santiago, quienes aguardan por una operación llevan más de doce meses esperando, si bien la cifra se redujo a la mitad en el último año.

La reducción en los tiempos de espera -que se constata también en las consultas, que pasan de los 40,1 a los 35,2 días de media, también el "menor histórico" logrado- tiene que ver, según el gerente del Servizo Galego de Saúde (Sergas), Antonio Fernández-Campa, con que el Sergas pudo beneficiarse de una financiación adicional que cifró en "prácticamente cinco millones de euros" obtenida de los recursos que la comunidad recibió de forma adicional como consecuencia de su "comportamiento presupuestario". Dichos fondos permitieron que se pudiera "reducir este período de tiempo de espera" de los pacientes. Unos 34.000 gallegos, apostilló, se beneficiaron de más actividades de consultas y quirúrgicas y más pruebas diagnósticas. Esa actividad, explicó, se llevó a cabo a través de "jornadas extraordinarias" -se realizaron pruebas en "sábados o domingos", indicó- o utilizando los recursos disponibles de centros concertados. También se registraron contrataciones de "refuerzo" en algunas áreas, como Enfermería.