Los jóvenes gallegos -de 18 a 35 años de edad- están considerados los sextos mejores amantes en España, superados por los andaluces, canarios, madrileños, valencianos y catalanes. Pero calidad no es sinónimo de cantidad, variedad o innovación. El Barómetro 2016 Los jóvenes españoles y el sexo, elaborado por la marca de preservativos Control, resalta que la vida sexual de los gallegos "es, principalmente, monótona".
Esta aseveración se apoya en las opiniones de jóvenes encuestados, ya que ocho de cada diez afirma que le gustaría probar cosas nuevas. En esas propuestas de I+D sexual, figuran desde practicar nuevas posturas (al 79% de los jóvenes gallegos le gustaría variar más las posiciones), practicar sexo en un lugar público (47%) o probar con juguetes sexuales (29%), además de grabar una escena pornográfica o mantener relaciones con alguien del mismo sexo, sin olvidar fantasías como sexo anal, un trío y participar en una orgía.
Lo curioso es la barrera existente entre los anhelos y la realidad. Por un lado, la juventud gallega tiene, al año, una media de 88 relaciones sexuales -los quintos más activos en el Estado, un poquito lejos de los 100 coitos de los primeros, los canarios- cuando su sueño sería alcanzar las 223. Galicia es la comunidad donde se desearía tener más veces sexo. La segunda, La Rioja (214 coitos soñados frente a los 125 reales); y la tercera, Andalucía. En esta última, tienen una media de 85 relaciones sexuales al año y les gustaría llegar a las 204.
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Jaime Liriano, responsable de Negocio de la marca Control, no escondía ayer cierta sorpresa ante algunos datos gallegos. "Me parece curioso que Galicia sea una de las comunidades que más sexo quiera tener. La media nacional dice que desea mantener relaciones sexuales cada dos o tres días; mientras que en Galicia dicen (el 43%) que quieren tener sexo cada día".
Otros datos salientables del estudio respecto a Galicia son que casi un 28% de los jóvenes gallegos ha mantenido relaciones sexuales a través de la Red o cibersexo. Entre las prácticas sexuales deseadas, gana el hacer un trío, participar en una orgía o practicar sexo anal.
Un índice alarmante es que el 10% de los encuestados en Galicia considera erróneamente la marcha atrás como método anticonceptivo mientras que un 21% cree que marcha atrás, DIU y los anticonceptivos hormonales cubren la doble función de evitar embarazos indeseados como frenar la transmisión de enfermedades de índole sexual. Si bien el 80% asegura practicar sexo oral, solo el 4,6% utiliza preservativo cuando lo practica.
A nivel estatal, la insatisfacción juega más en territorio femenino ya que casi la mitad de las mujeres encuestadas reconoció tener dificultades para llegar al orgasmo y el 53% del total confesó fingirlo frente al 15% del sector masculino.
