Los farmacéuticos coruñeses reconocen que algunos medicamentos "pueden alterar la adaptación del organismo al calor" y agravar un hipotético golpe de calor. "Pero nunca está justificado considerar la disminución o suspensión de estos fármacos. Será el médico quien valore la necesidad de un cambio de tratamiento en función de varios factores como la patología y edad del paciente, su nivel de hidratación o si es polimedicado", señalan en el Centro de Información del Medicamento del Colegio Oficial de Farmacéuticos de A Coruña, donde explican que fármacos como los diuréticos pueden causar alteraciones de la hidratación u otros como los antinflamatorios no esteroideos, algunos antihipertensivos o antidiabéticos pueden alterar la función renal. Y en caso de sufrir una insolación también hay algunos fármacos que habría que evitar, pero siempre lo determinará el facultativo que atienda al paciente.