El Centro de Investigación Biomédica en Red sobre la Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición y la Sociedad Europea de Hipertensión acaban de actualizar el documento europeo en el que se establecen las directrices para el manejo de la hipertensión en niños y adolescentes. Esta guía clínica, que alerta de la creciente incidencia de la hipertensión arterial en edades pediátricas, recomienda la medida de la presión arterial desde los 3 años, volviendo a revisarla cada dos años en adolescentes y niños normotensos y cada año en pacientes que presenten un nivel normal-alto.

Los expertos han constatado la relación entre la presión arterial elevada durante la infancia y la adolescencia con una mayor probabilidad de sufrir hipertensión y enfermedades de tipo cardiovascular en la edad adulta, evidenciando la necesidad de mejorar las medidas de prevención unidas a una vida activa y una dieta equilibrada.

El grupo de trabajo ha conjugado los datos científicos con la experiencia clínica a la hora de concretar y elaborar las directrices para el tratamiento de la hipertensión pediátrica. La guía responde a la necesidad de establecer recomendaciones ante la proliferación de enfermedades, hasta ahora asociadas a los adultos.