El Laboratorio de Consumo de Galicia realiza cada año miles de pruebas y ensayos a cientos de artículos de todo tipo para comprobar su calidad y seguridad. Desde el pasado mes de enero, este centro ha realizado unos 6.500 ensayos con cerca de 300 artículos, de los que el 70% eran juguetes y productos infantiles o prendas textiles. En concreto, en los primeros ocho meses de 2016, los técnicos del laboratorio examinaron 130 productos textiles, 80 del área mecánica (que abarca desde juguetes a productos de puericultura), 66 electrónicos (móviles, tabletas o cargadores de cámaras y teléfonos) y una veintena en el área eléctrica (pequeños electrodomésticos), según informan desde este centro, ubicado en el Polígono de A Grela en A Coruña.
Uno de cada cinco productos analizados presentó alguna anomalía que suponía un riesgo para el consumidor ya que desde este laboratorio detectaron 63 artículos inseguros y que por tanto, se instó a su retirada del mercado. A la hora de analizar qué productos son los que protagonizan un mayor número de alertas, los juguetes ocupan el primer puesto. "Realmente en su mayoría son artículos seguros pero analizamos muchos más que de otras categoría y de ahí los datos", indica la directora del centro, Natalia Crespo.
