El papa Francisco alertó ayer de que el planeta continúa calentándose, "en parte a causa de la actividad humana" y pidió a los fieles una "conversión ecológica" que lleve a cabo iniciativas que promuevan "la justicia ambiental, la solicitud hacia los pobres y el compromiso responsable con la sociedad".

El Pontífice recordó que el año 2015 fue el más caluroso jamás registrado y que probablemente el 2016 lo será aún más", con motivo de la Jornada Mundial de Oración para el cuidado de la Creación, que se celebró ayer en Roma.