Una monja de nacionalidad española murió el pasado viernes después de ser tiroteada en Puerto Príncipe, la capital de Haití, en lo que las autoridades consideran un acto de delincuencia común. La víctima es Isabel Solá Matas, recibió varios disparos en torno al mediodía en el barrio de Sans-Fil.

Solá trabajaba en la Parroquia del Sagrado Corazón de la ciudad, a la que regresaba cuando varios hombres armados le pidieron el bolso, informa la cadena de televisión haitiana RTVC.

"Confirmamos la muerte de la ciudadana española. Vamos a ponernos en contacto con sus seres queridos. La Dirección Central de la Policía ha abierto una investigación y estamos siguiendo todas las pistas", informó un portavoz policial, Garry Deesrosiers, citado por RTVC.

La religiosa no estaba sola en el coche Toyota Land Cruiser cuando fue atacada. Hay una segunda persona herida por dos proyectiles de bala y está ingresada en un hospital con pronóstico grave.

Los delincuentes hirieron además a dos personas más, transeúntes de la zona, según testigos presenciales, que señalan que anteriormente habían robado en un comercio cercano.

Javier y Fernando Solà Matas, hermanos de Isabel, destacaron ayer la labor de la religiosa en favor de las personas que sufrieron amputaciones en el terremoto que asoló ese país en enero de 2010. En declaraciones a Efe televisión, explicaron que Isabel llegó en 2008 a Haití tras haber permanecido 18 años en Guinea Ecuatorial, donde se centró en labores educativas y de apoyo a las mujeres. "Cuando llegó a Haití empezó también a montar escuelas", señalaron.