La plataforma SOS Sanidade Pública ha presentado una denuncia contra la Consellería de Sanidade por la "mala calidad" de las agujas para inyectar insulina que entrega a los diabéticos, ya que las que actualmente distribuye el Servizo Galego de Saúde (Sergas) provocan "dolor y hematomas" e, incluso, llegan a "doblarse y romperse" en el interior de los pacientes. La demanda se entregó ayer en el juzgado de As Fontiñas, en Santiago, en la que se recogen "más de 400 quejas" de pacientes de diabetes. Allí, el portavoz de SOS Sanidade Pública, Xosé María Dios Diz, alertó de que el Sergas es conocedor de esta problemática "desde hace dos años", cuando se empezaron a presentar quejas ante "la gerencia, Sanidade y la Valedora".

En la denuncia, la plataforma afirma que las agujas desechables que suministra el Sergas a los pacientes con diabetes que deben inyectarse insulina a través de "plumas precargadas" causan problemas, como que "no se enroscan bien", con el consecuente riesgo de que se administre mal la cantidad pudiendo provocar "cambios en el control metabólico, como hiperglucemias o hipoglucemias".

También apunta que las agujas "se doblan, causando desgarros al retirarse del cuerpo" o "se rompen dentro del cuerpo del paciente". Este es el caso de una mujer -cuya radiografía adjuntan en la denuncia- que tiene cinco agujas alojadas en su abdomen y que debe someterse a una operación quirúrgica para retirarlas.