Una niña de menos de un año falleció el pasado lunes en el hospital Parc Taulí, de Sabadell (Barcelona), por el enterovirus A-71, después de que fuera diagnosticada a finales de julio pasado. Otros dos fallecimientos sospechosos anteriores, una niña de Reus (Tarragona) y un niño en Mataró (Barcelona), no se contabilizan como afectados por este brote de enterovirus porque, en el primer caso, no se consiguió identificar el virus y, en el segundo, la sintomatología clínica no era compatible, indicaron desde la Generalitat.

Los enterovirus son un tipo de virus que circulan ampliamente entre la población y mayoritariamente producen cuadros leves (fiebre, erupciones cutáneas o cuadro respiratorio) y a menudo las infecciones son asintomáticas. A pesar de este último fallecimiento, la Generalitat ha dado por finalizado el brote de enterovirus en Cataluña al considerar que desde finales de junio hubo "casos esporádicos", cinco en concreto.