Cómo prevenir el acoso escolar. La implantación de protocolos antibullying en los centros escolares: una visión práctica y aplicada es el primer manual en España que trata de implicar a toda la comunidad educativa para combatir un problema cuyas cifras son cada vez más alarmantes. En el año 2015 hubo 643 casos de acoso escolar en España según el Estudio sobre ciberbullying según los afectados, realizado por las fundaciones ANAR (Ayuda a niños y adolescentes en riesgo) y Mutua Madrileña.

Iñaki Piñuel y Óscar Cortijo, los profesores coautores de este primer libro español que plantea cuestiones como la forma de identificar el acoso escolar a tiempo y la implantación de iniciativas de prevención en los centros, hacen hincapié en que no se puede "banalizar la violencia". "Siempre me han preocupado la negación y la banalización de la violencia que son las que permiten que sucedan los casos de acoso escolar. El banalizar el acoso en los centros escolares, genera desgraciadamente la no intervención y la permisividad. Las consecuencias y secuelas en las víctimas -que han acabado en suicidios muchas veces-, el bajo rendimiento de todos los alumnos que pertenecen a un grupo donde se da este tipo de violencia y permitir la escalada de niños violentos que posteriormente van a ser adultos que van a repetir patrones de conducta tanto en el hogar como en el trabajo, ha hecho despertar la percepción de la opinión pública. Tanto el profesor Piñuel como yo venimos denunciando esta violencia en las aulas y la necesidad de implantar planes integrales de prevención e intervención desde hace ya años", explica Cortijo.

El objetivo de este libro, publicado por la editorial CEU, es divulgar las buenas prácticas y, además de dar pistas a los padres para que estén atentos a los posibles indicios que se pueden manifestar en el hogar si su hijo está siendo acosado por un grupo de compañeros en el colegio, también incluyen el cuestionario Tebae que, según explican, permite a los centros darse cuenta de su tienen algún caso de bullying entre sus alumnos.

"Sin caer en el alarmismo, padres y profesores deben fijarse en si hay un cambio de personalidad brusco del niño o la niña en casa, que no quieren ir al colegio, que los domingos se niegan en rotundo a ir a clase al día siguiente, que vuelven a casa con la ropa deteriorada o les falta material, si dan excusas para no ir a clase, si evitan la relación con otros compañeros y no quieren acudir nunca a fiestas de cumpleaños o si permanecen aislados en el recreo", detalla Cortijo, quien asegura que el protocolo que propone a los centros pone al alumno "como protagonista" y tiene que tener en cuenta el uso de la tecnología porque el ciberacoso es un canal más de violencia.

"Con este protocolo se podrían recortar o aminorar al máximo los casos y, por tanto, las secuelas que se producen en los niños y niñas, que es lo más grave", dice uno de los autores de este manual.

Más de 60 alertas en la 'app'

Por otra parte, ayer se hizo público que la aplicación para teléfonos móviles Alertcops del Ministerio del Interior registró en sus primeros 18 meses de implantación un total de 63 alertas por casos de supuesto acoso escolar, según los datos difundidos por el departamento de Jorge Fernández Díaz. Según apunta Interior, esta aplicación móvil gratuita permite poner en conocimiento de las fuerzas de seguridad una serie de situaciones de riesgo, entre las que se encuentran las del acoso escolar.

La aplicación, que rebasó las 285.000 descargas, envía a la la Policía Nacional y a la Guardia Civil -según la demarcación- una alerta geolocalizada en tiempo real sobre un delito o situación de riesgo de la que se es víctima o testigo, para establecer un diálogo con el centro policial receptor de la alerta. En los 18 meses de plena implantación de Alertcops -en todas las comunidades, salvo Cataluña y País Vasco- se atendieron 63 alertas específicas por acoso escolar. Interior sostiene que la prevención del acoso escolar es una prioridad que combate la Secretaría de Estado de Seguridad a través del Plan Director para la convivencia y mejora de la seguridad en los centros educativos y sus entornos, que cada año es revisado y actualizado.

Además de la aplicación, los afectados pueden emplear el chat disponible para contactar directamente con la Policía Nacional o la Guardia Civil, una vía que según Interior se ha empleado en "numerosas comunicaciones" de menores denunciando o poniendo en conocimiento casos de acoso escolar o, sencillamente, solicitando ayuda o consejo por este tema.

Igualmente, agentes expertos de la Policía Nacional y de la Guardia Civil que reciben formación especializada se desplazan a las aulas de los centros educativos de toda España y realizan actividades de formación y sensibilización impartiendo charlas dirigidas a alumnos, padres y madres de familia y a la comunidad docente. Durante 2015 se impartieron en este programa más de 32.000 charlas.