El papa Francisco proclamó ayer santo en una ceremonia multitudinaria al obispo español de Málaga y Palencia Manuel González García (1877-1940), fundador de las Hermanas Nazarenas y promotor de la devoción a la eucaristía, durante una ceremonia en la Plaza de San Pedro en el Vaticano.

Bajo los grandes tapices con la imagen de los siete nuevos santos colocados en la fachada de San Pedro, Francisco utilizó como es habitual la formula en latín para proclamar la santidad del obispo. Durante la ceremonia también se proclamaron otros seis santos como José Sánchez del Río, asesinado a los 14 años durante la revuelta contra los llamados cristeros o el sacerdote argentino José Gabriel del Rosario Brochero.