Para afrontar el impacto del envejecimiento poblacional sobre el sistema sanitario, la Consellería de Sanidade apuesta también por reducir la dependencia de los pacientes de los servicios sanitarios. Es decir, que se cuiden más en casa para evitar que vayan al médico. El Sergas apuesta por su "participación, implicación y autonomía" y para ello contará con el apoyo de nuevas herramientas tecnológicas. Es el llamado hogar digital, una iniciativa que la Consellería de Sanidade tiene en marcha. Con el plan Código 100 busca nuevas tecnologías que permitan ampliar la posibilidades de atención sanitaria a domicilio. Y una de las propuestas de la Xunta es desarrollar aplicaciones móviles que ayuden a dosificar medicamentos o que eviten que los enfermos se olviden de tomar sus medicinas.

Como ejemplo, pone una aplicación móvil que ayude a dosificar los anticoagulantes. Las personas que siguen un tratamiento anticoagulante tras sufrir una trombosis venosa profunda o debido a una embolia pulmonar deben controlar su tiempo de protrombina o INR, que es un índice que mide el punto de anticoagulación de la sangre, para evitar hemorragias (sangre demasiado líquida) o nuevos trombos (sangre demasiado densa). A través del móvil van anotando su índice de INR y, en función de eso, pueden determinar la dosis que deben tomar de anticoagulante.

El Servizo Galego de Saúde también buscará modernos sistemas que permitan prevenir la entrada en hemodiálisis, que faciliten la adherencia a los tratamientos -recordando las horas y las fechas de a las que se debe tomar cada fármaco, por ejemplo- y que asimismo sirvan para controlar posibles interacciones con otros medicamentos.

El objetivo de estos recursos e iniciativas es que los pacientes "autogestionen" su salud y "evitar el uso innecesario de los recursos sanitarios (urgencias, pruebas diagnósticas, hospitalizaciones...).