Un saudí que hace veinte años perdió la visión por una enfermedad inflamatoria de la superficie ocular, ha logrado recuperar un 50% de vista con un tratamiento inmunodepresor, un trasplante de células madre del limbo y de córnea al que fue sometido en el Instituto de Microcirugía Ocular (IMO) de Barcelona.

Amed Mohsen, al que en la misma intervención le sometieron a una cirugía de catarata, sufrió hace veinte una queratoconjuntivitis cicatrizante, una enfermedad inflamatoria crónica de la superficie ocular, lo que le provocó que su agudeza visual fuera de apenas percepción de la luz en ambos ojos. Según explicó él mismo, "dependía siempre de mi bastón y de alguien que me ayudara, por lo que nunca podía ir solo por la calle y era totalmente dependiente".

Para salir de esta situación decidió buscar una respuesta fuera de su país, donde ya había sido intervenido sin éxito y no le habían dado ninguna expectativa de que pudiera recuperar visión.