La bodas civiles ganan en número a las ceremonias religiosas para contraer matrimonio en todo el país, pero el peso de estos enlaces varía en función de la provincia analizada. En el caso de A Coruña, la cifra de parejas que deciden casarse sin pasar por la Iglesia aumentó un 50% en la última década y se sitúa ya en el top ten de provincias españolas con mayor tasa de este tipo de enlaces. Durante el primer semestre de este año hubo 1.455 bodas en A Coruña, de las que 1.183 fueron civiles (el 81,3%), lo que supone seis puntos por encima de la media española (75,9%) y situarse como décima con mayor porcentaje, según los datos que publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE).

A nivel gallego, A Coruña es la provincia con mayor volumen de matrimonios -tanto civiles (1.183 en los seis primeros meses de 2016) como religiosos (231)-, pero es la segunda en donde las bodas oficiadas por un alcalde o concejal tienen mayor peso. Pontevedra encabeza la clasificación gallega ya que en esta provincia el 85% de enlaces fue por lo civil (691) mientras que en Lugo, estas bodas suponen el 78,6% del total de matrimonios y en Ourense, el 77%. El top ten estatal, por tanto, incluye este año a dos provincias gallegas. Girona es dónde hay un mayor porcentaje de bodas oficiales de toda España (representan el 88,8% de los matrimonios de la provincia), seguida de Barcelona (88,7%), Tarragona (85,6%), Guipúzcoa (85,6%), Vizcaya (86,3%), Álava (85,9%), Pontevedra (85%), Baleares (84,8%) y Lleida (82,6%).

La estadística que presentó ayer el INE revela grandes diferencias entre las provincias que lideran la clasificación y las que la cierran. Pese a que las bodas civiles superan en número a las religiosas en todas las provincias -excepto en Jaén, donde en lo que va de año hubo 459 enlaces por la Iglesia y 405 civiles (representan sólo el 46%)-, hay grandes contrastes de unas zonas a otras. Las provincias con menor porcentaje de enlaces civiles tras Jaén son Ciudad Real (la mitad de los enlaces son religiosos), Córdoba (sólo el 56% de parejas opta por una ceremonia no religiosa) y Badajoz (el 57,6%).

Pese a que los matrimonios civiles son una tendencia en auge, la situación dio un giro de 180 grados en tan solo una década. En el año 2006, seis de cada diez españoles que decidía contraer matrimonio con su pareja lo hacía por el rito de la religión católica y las bodas civiles solo eran mayoría en ocho provincias, precisamente donde todavía hoy en día tiene mayor presencia este tipo de ceremonias: Baleares, Barcelona, Girona, Guipúzcoa, Lleida, Las Palmas, Tenerife y Tarragona.

A Coruña se ajustaba a la situación predominante. De los 4.776 matrimonios que se registraron en la provincia hace justo una década, el 58% se celebraron en presencia de un sacerdote en una Iglesia. Las ceremonias religiosas ganaban por 2.772, frente a 2.023 civiles: 1.986 entre parejas de diferente sexo y 37 entre personas del mismo. El aumento de las bodas civiles se produjo paulatinamente y hace cinco años -en 2011- ya superaban a las religiosas en la provincia. De este modo, los enlaces civiles aumentaron un 50% en diez años y un 25% en los últimos cinco en la provincia coruñesa.

Por comunidades, Galicia es la cuarta con más bodas civiles -por debajo de Cataluña, Baleares y País Vasco- mientras que Castilla-La Mancha y Extremadura, en donde hay más parejas que optan por casarse por la Iglesia.