La Plataforma Estatal por la Escuela Pública confirmó ayer la convocatoria de huelga general en todos los niveles y sectores de la enseñanza el 9 de marzo próximo para exigir al Gobierno la derogación de la Lomce y una "hoja de ruta" hacia un pacto social educativo, no solo político. La plataforma está integrada por los sindicatos CCOO, STES, UGT y CGT, los alumnos del Sindicato de Estudiantes, Frente de Estudiantes, Estudiantes en Movimiento y Faest; los padres de Ceapa y los Movimientos de Renovación Pedagógica.

El presidente de los padres de Ceapa, José Luis Pazos, instó a que el Gobierno comience por retirar el recurso "inaceptable" en el Tribunal Constitucional que pretende impedir que el Congreso tramite una iniciativa legislativa encaminada a suspender la Lomce. Pazos arremetió contra nuevos recortes en educación que exige la UE cuando, aseguró, se trata de recuperar los miles de millones de inversión educativa pública perdidos durante la crisis. El presidente de Ceapa también se manifestó contra cualquier nueva "contrarreforma" educativa, la "privatización" de la enseñanza y el "retraso" con que comenzará a trabajar la subcomisión parlamentaria que negociará el pacto educativo. "La educación necesita un cambio sustancial y rápido (...) Necesitamos un acuerdo que nos lleve a la eliminación de la Lomce en en el plazo de seis meses", y una "nueva ley", que tiene que salir del Congreso, urgió Pazos.

El secretario general de Enseñanza de CCOO, Francisco García, insistió en que el pacto educativo social "no se ve", solo el político. García también advirtió contra un pacto a cualquier precio, es decir, "no se puede aceptar cualquier acuerdo, sino que habrá que juzgar su contenido". "Habrá pacto solo si se garantiza el derecho a la educación y sirve para revertir los recortes y las condiciones sociolaborales del profesorado, derogar el decreto ley de racionalización del gasto educativo público, asegurar la equidad y rebajar las tasas universitarias". Y, sobre todo, "sin derogar la Lomce no entraremos en ningún pacto educativo", anunció.

Por su parte, Maribel Loranca, de UGT, denunció que el PP sigue comportándose como si continuara aún con mayoría absoluta, "ignorando" a los representantes de los trabajadores de la enseñanza, así que también hay razones laborales para la huelga general educativa, la tercera desde que gobierna el PP.

En este sentido, Voro Benevent, de STES, demandó al Ministerio de Educación hechos, no una "fantasía de diálogo", pues "no existe".

En nombre de los estudiantes de Faest, Alejandro Delgado, hizo hincapié en cambiar el modelo de tasas universitarias y lamentó los miles de alumnos "expulsados" de la educación superior.

La secretaria general del Sindicato de Estudiantes, Ana García, dijo que la huelga no solo es contra el Gobierno, sino también contra la dirección "golpista" del PSOE, y que no estará en ningún pacto con la patronal y la Iglesia católica.

Otros sindicatos representativos de la educación pública, como ANPE y CISF, consideran que no hay motivos ahora mismo para una huelga, como tampoco los ve FSIE. También rechazan esta movilización los padres de Concapa, que son mayoría en la educación concertada.