La guerra que desde hace tiempo libran los promotores musicales contra la reventa de entradas encontró esta semana un poderoso aliado, Alejandro Sanz, aunque la regulación (o prohibición) de la misma, objeto central de la asamblea general que celebrará el gremio esta misma semana, no resulta tarea sencilla. El ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, aseguró el viernes tras el Consejo de Ministros que ha pedido un "informe jurídico" a su departamento sobre la reventa y que es un tema que "merece darle una vuelta", aunque precisó que no es una competencia estatal sino autonómica.

La Asociación de Promotores Musicales (APM), la mayoritaria del sector en España, se reunirá e intentará este miércoles y jueves relanzar su propuesta para el Ministerio de Cultura. No será una reunión ordinaria, ni por esa cuestión ni por el primer cambio de presidencia desde 2009. Según fuentes internas, varios candidatos se disputan el puesto, incluido Neo Sala, su actual vicepresidente, máximo responsable de la potente Doctor Music y uno de los principales detractores de las plataformas de venta que han normalizado el cambio de manos de las entradas entre particulares.

Fue la promotora de los últimos conciertos en España de Bruce Springsteen la que en marzo de 2016 anunció una demanda contra ellas ante los organismos reguladores de espectáculos y de protección al consumidor. "Es una práctica que encarece las entradas de los conciertos de más demanda en beneficio de unos especuladores sin escrúpulos, ajenos al artista y a Doctor Music, que se lucran a costa de los aficionados a la música, los cuales ven cómo se agotan las entradas en los canales de venta legales, mientras su precio se dispara", señalaban en una nota. En el mismo se criticaba que Seatwave sea propiedad de Ticketmaster que, además de la principal distribuidora de tickets en el mercado primario, es también dueña de LiveNation, promotora y miembro de APM. Seatwave se defiende: "En cualquier industria donde la demanda excede la oferta siempre existe la posibilidad de que emerja un mercado secundario (...)".